4 de diciembre de 2011


No tendré un nombre que enamore, ni tendré una personalidad de oro, aún siendo yo misma...
No seré alta, ni rubia, ni siquiera tengo las medidas perfectas ni la silueta soñada...
No tendré ojos claros, ni una mirada cautivante, ni tendré el bronceado de piel como lo sueñan los demás...
No viviré en zonas populares, ni usaré ropa de la marca más reconocida que exista en la actualidad...
No tendré millones ahorrados para mi auto rosado, ni una mansión envidiable, ni un perro ricachón...
No seré la mejor de mi clase, ni la más linda siquiera...
No seré el mejor ejemplo a seguir, ni tendré una estampa impecable...
No saldré a pasear por los sitios más lujosos de la ciudad, ni tendré un auto personal, ni un yate, ni siquiera una bicicleta...
No tendré nada de nada... ni tengo, ni tuve... pero...
Nunca dudes de algo: puedo hacerte la persona más feliz del Universo...
Puedo transformarme en pañuelo y secar tus lágrimas cuando llores de impotencia, o cuando llores de alegría.
Puedo no estar físicamente a tu lado, pero puedo pensarte y comprometerme de todas maneras...
Puedo dejar atrás mil cosas por verte sonreír...
Puedo escucharte contando relatos alegres o tristezas amargas, dolorosas, o solamente oir tu voz.
Puedo abrazarte sin razones por el solo hecho de abrazarte y sacarte una sonrisa.
Puedo ser abrigo cuando tengas frío, y ser brisa fresca cuando tengas calor...
Puedo ser noche cuando quieras dormir, y ser sol cuando quieras salir a andar.
Puedo ser lluvia si querés llorar...
Puedo ser almohada cuando quieras soñar o simplemente descansar...
Puedo ser oído, alma, corazón, abrazo...
Puedo ser fuego cuando lleguemos alto, y puedo ser tormenta cuando haya que apagar las llamas...
Puedo ser las 4 estaciones del año...
Puedo ser todos los colores, incluso un arcoiris cuando llueva y quieras una señal de optimismo...
Puedo ser los 4 elementos y uno más...
Puedo ser lo que siempre estuviste buscando, lo que soñaste... hecho realidad...

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